Riesgos principales
El producto aún no ha superado los ensayos clínicos y todavía existe un riesgo tecnológico; aún necesita demostrar que el efecto de anticrecimiento bacteriano se mantiene de forma sostenida en pacientes, y demostrar la seguridad y biocompatibilidad. A pesar de que los ensayos no regulatorios han sido extremadamente exitosos, siempre existe un riesgo de que los ensayos no salgan bien. De ser así, el proyecto no tendría demasiada viabilidad.
Tractivus también se enfrenta al reto de conseguir comercializar el producto. Hasta ahora la empresa se ha centrado en desarrollar la tecnología, y será necesario que afronte con éxito las negociaciones con gigantes del sector para poder conseguir sus objetivos comerciales – que pasan, principalmente, por vender la empresa y su tecnología por una cantidad superior a los €40m.